La científica de la Universidad Católica del Maule, Sara Cuadros, logró producir una película que extiende la vida útil de las frutas, abriendo una atractiva oportunidad para la industria exportadora.
En hasta tres semanas podría retrasar la pudrición de frutas un hidrogel creado por un equipo de investigación de la Universidad Católica del Maule (UCM), liderado la doctora en Ciencias de los Alimentos, Sara Cuadros. El compuesto, que inhibe el crecimiento de hongos, evitaría pérdidas millonarias por pudrición en la industria exportadora de frutas.
“Todo depende de la temperatura de conservación, pero si la fruta se mantiene en frío, el hidrogel atrasa el surgimiento de pudrición en tres semanas al menos. Si hay quiebre de la cadena de frío, la protección se mantiene por una o dos semanas”, dijo la también académica de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la UCM, quien lideró el proyecto financiado por el Gobierno Regional de O’Higgins, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC–R).
“Nosotros preparamos este hidrogel en base a polímeros y extractos naturales con propiedades antifúngicas y lo incorporamos a la superficie interna de las bolsas para empacar uvas de mesa. A través de la emisión gradual de los compuestos volátiles que están encapsulados en el hidrogel, es que se da la protección”, agregó.
El hidrogel, que el centro de estudios busca patentar como una idea original, corresponde al resultado de tres años de investigación aplicada. “Durante el transporte -precisó Cuadros-, las frutas se conservan generalmente con una cadena de frío a temperaturas bajas, pero además es necesario ponerlas en bolsas muchas veces con atmosfera modificada, que tienen algunos emisores de gases que si bien inhiben el crecimiento de hongos, producen también daños a las frutas. Hay que buscar soluciones alternativas”.
Producto sustentable
En cuanto a la fabricación del hidrogel, la científica indicó que Chile dispone de todos los ingredientes. “El producto es sustentable porque tenemos las materias primas y las industrias que las transforman y, por lo tanto, potencia igualmente el desarrollo socioeconómico del país”, puntualizó.
Para el jefe comercial de “Envases PacLife”, Cristian Parra, quien acudió a un seminario dictado por la académica en San Fernando, la innovación representa una oportunidad de liderazgo.
“Insertar este tipo de productos sería para nosotros una ventaja competitiva, puesto que podríamos presentar a la industria de frutas y alimentos una tecnología que le permite hacer tránsitos más largos y llegar con un producto más seguro, más inocuo y más fresco a la mesa del consumidor final”, sostuvo el ejecutivo, cuya empresa cuenta con clientes en países como Perú, Argentina, Uruguay, Brasil y Colombia.
“Haríamos un salto cualitativo, porque nosotros le ofrecemos a la industria un producto que permite conservar, pero que no tiene control sobre hongos y bacterias. Este aditivo ofrecería un envase 2.0 que solucionaría estos inconvenientes”, afirmó.