Estudiar, documentar y preservar los sitios arqueológicos de manera más eficiente y precisa, es posible gracias a la ayuda de distintas técnicas de sensoramiento remoto. En Jaime Illanes (JIA), utilizamos la Aerofotogrametría y la tecnología de sensores LiDAR (Detección y Teledetección por Láser) para obtener información de objetos y terrenos con mayor precisión y detalle y sobre grandes extensiones de terreno, a través de la captura de datos a distancia.
El uso de estas tecnologías es cada vez más relevante en el campo de la arqueología. Las técnicas avanzadas para la recopilación de datos, el análisis espacial y la documentación, proporcionan una visión más completa y detallada de las culturas y civilizaciones antiguas, permitiendo una mejor preservación de los sitios arqueológicos.
Aerofotogrametría
La aerofotogrametría es una técnica de sensoramiento remoto que utiliza fotografías aéreas para obtener información de la superficie terrestre. Sus usos más comunes son la creación de mapas detallados de sitios arqueológicos, incluyendo la topografía y ubicación de estructuras; la detección de características ocultas, a través de la revelación de estructuras enterradas y elementos no visibles desde el suelo, y la documentación y conservación digital de los sitios arqueológicos en su estado actual. En el área de Patrimonio Cultural de JIA, se utiliza para la identificación de sitios arqueológicos, la consignación de las características topográficas de ellos y el mapeo de la distribución de los objetos en la superficie terrestre.
Estudiar, documentar y preservar los sitios arqueológicos de manera más eficiente y precisa, es posible gracias a la ayuda de distintas técnicas de sensoramiento remoto. En Jaime Illanes (JIA), utilizamos la Aerofotogrametría y la tecnología de sensores LiDAR (Detección y Teledetección por Láser) para obtener información de objetos y terrenos con mayor precisión y detalle y sobre grandes extensiones de terreno, a través de la captura de datos a distancia.
El uso de estas tecnologías es cada vez más relevante en el campo de la arqueología. Las técnicas avanzadas para la recopilación de datos, el análisis espacial y la documentación, proporcionan una visión más completa y detallada de las culturas y civilizaciones antiguas, permitiendo una mejor preservación de los sitios arqueológicos.
Aerofotogrametría
La aerofotogrametría es una técnica de sensoramiento remoto que utiliza fotografías aéreas para obtener información de la superficie terrestre. Sus usos más comunes son la creación de mapas detallados de sitios arqueológicos, incluyendo la topografía y ubicación de estructuras; la detección de características ocultas, a través de la revelación de estructuras enterradas y elementos no visibles desde el suelo, y la documentación y conservación digital de los sitios arqueológicos en su estado actual. En el área de Patrimonio Cultural de JIA, se utiliza para la identificación de sitios arqueológicos, la consignación de las características topográficas de ellos y el mapeo de la distribución de los objetos en la superficie terrestre.
Sensores LiDAR (Detección y Teledetección por Láser)
Se trata de una técnica de sensoramiento remoto que utiliza pulsos láser para medir la distancia entre un objeto y el sensor, generando densas nubes de puntos con coordenadas en tres dimensiones (x, y, z). Los datos capturados se pueden utilizar para crear modelos digitales 3D como mapas de relieve, reconstrucciones tridimensionales de áreas arqueológicas y objetos patrimoniales en general. En arqueología, estos sensores se han utilizado para identificar estructuras ocultas, paisajes culturales y mapear la distribución de objetos arqueológicos en el suelo.
Realidad Aumentada
La Realidad Aumentada (RA) es una tecnología que combina elementos virtuales con el entorno real, creando una experiencia inmersiva en la que los objetos digitales se superponen y se integran con el mundo físico. La RA permite visualizar objetos y estructuras arqueológicas en su ubicación original o en un entorno virtual, superponiendo modelos en 3D de artefactos o edificios antiguos en el lugar donde fueron encontrados o en una réplica digital del sitio arqueológico, ayudando a comprender cómo se verían los objetos y las estructuras en su contexto original. De esta forma, también permite entender cómo esos elementos se relacionan con la topografía y el paisaje circundante.
En efecto, se considera que la Realidad Aumentada es el punto clave para la comunicación o exposición de la información arqueológica -recabada con distintos sensores remotos- al público no especializado, generando conciencia del tipo de objetos, estructuras y rasgos que son considerados patrimoniales.
Desafíos pendientes
Aún existen desafíos que las tecnologías no han logrado resolver, como la integración de datos de diversas fuentes de sensoramiento remoto; el mapeo y documentación de sitios en base al mejoramiento de la fotogrametría basada en drones y la tecnología de escaneo láser móvil, y la aplicación de técnicas de aprendizaje automático y análisis de grandes conjuntos de datos, lo que permitiría la identificación automática de patrones y características, acelerando aún más la identificación y evaluación de los sitios arqueológicos.