Después de más de siete décadas nació por primera vez un polluelo de yunco en la isla Chañaral en Chile. Esta ave marina dejó de ser registrada en la zona desde 1943 luego de ser depredada por especies invasoras. Algunos expertos aseguran que el linaje que habitó originalmente la isla se extinguió pero un grupo de científicos tiene un proyecto que busca cambiar esta situación.
La desaparición de los yuncos
La isla Chañaral forma parte de la Reserva Pingüino de Humboldt que, hasta inicio de la década de los cuarenta, estaba habitada por una gran cantidad de yuncos. Esta ave marina, también conocida como petrel buceador peruano, es endémica de la corriente Humboldt por lo que solo se le puede encontrar en Chile y Perú.
En la isla Chañaral había tantas parejas de yuncos que se consideraba la colonia de esta especie más grande a nivel mundial. Según María José Vilches, coordinadora de conservación de Island Conservation en Chile, en la isla se llegaron a registrar hasta 100 000 parejas reproductoras. Sin embargo, para 1943 no quedaba ni un solo yunco, complementa el biólogo marino experto en aves, Yerko Vilina. ¿Qué pasó?
La isla Chañaral, antes de que fuera declarada área protegida en 1990, fue continuamente ocupada por pequeños asentamientos humanos. “Incluso hay vestigios de culturas prehispánicas, como los changos, y se han encontrado influencias incas”, asegura el guardaparques, Cristian Rivera. No fue hasta la década de los treinta que el ser humano acabó con la población de yuncos. Ello ocurrió cuando “un magnate minero introdujo zorros en la isla que aniquilaron a la población de yuncos. No quedó ninguno”, cuenta Vilina.
Más de siete décadas después del último registro que se tiene de esta ave en la isla, que data de los años cuarenta, Conaf e Island Conservation se dieron a la tarea de restaurar la isla Chañaral para que los yuncos vuelvan a habitarla.
Redacción.Mongabay (Artículo);