Desembocaduras de los ríos Mataquito y Huenchullamí son declarados sitio de importancia regional de la RHRAP

0
307

Por Cynthia Fonseca, Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile, ROC.

Debido a su relevancia para la conservación del pilpilén común, el pasado 10 de mayo se llevó a cabo la declaratoria de la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (RHRAP) con la finalidad de anunciar el sistema Mataquito-Huenchullamí como nuevo “sitio de importancia regional” de la RHRAP en Chile.

Esta área de 846 hectáreas de extensión, es compartida por las comunas de Licantén y Curepto, en las Provincias de Curicó y Talca, Región del Maule. Siendo característico del lugar, la presencia de grandes extensiones de playas, humedales costeros y dunas, en donde se han registrado cerca de 150 distintas especies de aves.

Vista aérea de la desembocadura del río Mataquito. Fotos: Juan Silva.

Además, se encuentran lagunas costeras permanentes y temporales de diferentes tamaños, convirtiendo al área en un complejo de humedales que continúan extendiéndose varios kilómetros más al sur, como los humedales de Putú-Huenchullamí (Santuario de la Naturaleza), Laguna Junquillar y desembocadura del río Maule.

De acuerdo con Franco Villalobos, coordinador del Programa Aves Acuáticas y Humedales de la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile (ROC) Mataquito-Huenchullamí, además de convertirse en el décimo sitio RHRAP en Chile, tiene la particularidad de ser “el único ecosistema Maulino identificado como un sitio clave en la Ruta Migratoria del Pacífico en América, pues recibe alrededor de una veintena de especies de aves playeras migratorias, tanto neárticas como neotropicales”, expresó.

Vista aérea de la desembocadura del río Huenchullamí. Fotos: Juan Silva.

Tal como se mencionó anteriormente, es un sitio muy relevante para el pilpilén común debido a que “hay registros que congregan a más de 1000 individuos durante el invierno. Por lo que en términos generales, el sitio alberga por lo menos el 1.4% de la población biogeográfica de la especie en la actualidad. También, esta área es importante para las comunidades humanas, ya que los ecosistemas presentes permiten realizar actividades económicas como el turismo, la pesca y la agricultura”, afirma Villalobos.

El pilpilén común actualmente se encuentra en la categoría Casi Amenazada (NT), siendo sus principales amenazas las actividades humanas, tales como el tránsito de vehículos 4×4 en su hábitat y perros sin supervisión que destruyen sus nidos y depredan huevos y crías.

pilpilén común – Juan Carlos Carreño Rojas

En relación a lo anterior, Patricio Guerrero, gestor territorial de la ROC en la Región del Maule comenta que desde 2019 junto a la Red de Protección de Aves Playeras de la organización, han desarrollado monitoreos al pilpilén común y chorlo nevado en Playa La Trinchera y Desembocadura del río Huenchullamí “realizando conteos de individuos, registros de conductas reproductivas, identificación y seguimiento de nidos y polluelos. Donde hemos vinculado este trabajo con escuelas y municipios de la zona, en conjunto con sus funcionarios, docentes, alumnos/as y vecinos/as, activando aulas y terrenos para dar a conocer y conservar las aves playeras”, explica.

La postulación de este sitio, fue liderada por la ROC con el apoyo de la Capitanía de Puerto de Constitución (Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante) como entidad responsable y también gracias a Daniela de la Jara, Seremi de Medio Ambiente de la Región del Maule, quienes desde un principio se interesaron y comprometieron con la protección de la biodiversidad y el ecosistema de esta localidad.

Desde la ROC, Franco Villalobos enfatiza en que este reconocimiento posiciona a Mataquito-Huenchullamí a una escala internacional pues ahora forma parte de una red de sitios y actores vinculados a la conservación de aves playeras. Lo que puede facilitar la llegada de financiamiento, el intercambio de experiencias y el fortalecimiento de capacidades locales. Además de contribuir a contar con apoyos para mejorar la gobernanza, sostener el monitoreo de especies, entre otros.

playero blanco – Juan Carlos Carreño Rojas

ROC agradece a los distintos actores e instituciones claves de la región, quienes colaboraron con cartas de apoyo para fortalecer esta petición. Entre ellas: las Municipalidades de Curepto y Licantén, a través de la firma de los respectivos Alcaldes, la Secretaría Regional Ministerial del Medio Ambiente del Maule, la Agrupación por el Respeto y Cuidado Animal de Curepto, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), el Sindicato de Pescadores Artesanales Mataquito-La Pesca, la Agrupación Defensa y Conservación Maule-Mataquito (ADEMA), y la organización Mataquito Río Abajo.

- Publicidad -