Con algunos tips y explicaciones breves, el Pacto Chileno de los Plásticos presentó la Guía de Reciclaje 2024, destinada a facilitar la participación activa de las personas en el proceso de selección y entrega de sus residuos de envases y embalajes.
La colaboración de los Gransic ReSimple y Giro permitió actualizar los consejos a la forma de operar de la Ley REP, resolviendo las dudas que se generan con esta nueva forma de reciclaje, cuya meta es llegar al 80% de los hogares el 2035.
Luego de lanzar el estudio Reciclando-ando 2024, que registró las percepciones de las personas en Chile respecto a los temas ambientales, el Pacto Chileno de los Plásticos presentó la versión actualizada de la Guía de Reciclaje para envases y embalajes. El documento puede ser descargado desde la web de Circula el Plástico y cuenta con la colaboración de los Gransic ReSimple y Giro, aporte que permitió incorporar consejos alineados con sus sistemas de recolección de residuos.
Educación como base del cambio
“La educación ambiental es clave para producir un cambio real. El reciclaje comienza en casa, con una correcta separación de los residuos, pero para que funcione necesitamos educación constante e intergeneracional”, señala Alejandra Kopaitic, directora del Pacto Chileno de los Plásticos.
En este contexto, la Guía de Reciclaje ofrece información clara y accesible para que los ciudadanos sepan qué materiales pueden reciclar, cómo clasificarlos y cómo entregarlos para su recolección. Además, complementa los recursos disponibles en plataformas de los Gransic, como aplicaciones móviles que informan sobre los residuos reciclables en cada comuna.
A un año de la Ley REP: desafíos y avances
Según Macarena Palma, gerente de Marketing y Asuntos Públicos de ReSimple, uno de los grandes desafíos tras un año de implementación de la Ley REP es aumentar la participación ciudadana en el reciclaje. “Aunque más del 50% de la población indica que recicla, solo el 20% participa activamente en los sistemas de recolección formal. Por eso, la Guía de Reciclaje es una herramienta transversal que educa de forma sencilla sobre materiales reciclables y prácticas correctas para su disposición”, destaca Palma.
Aumentar y optimizar el reciclaje
Por su parte, Nelson Urra, gerente general de Giro, enfatiza que “este tipo de iniciativas resulta esencial, no solo para mejorar las tasas de reciclaje, sino también para sensibilizar sobre la correcta disposición de los materiales, optimizando el ciclo de valorización de los residuos. Además, con sellos como ‘Elijo Reciclar’, la guía ayuda a identificar rápidamente qué productos son reciclables, facilitando que las personas adopten hábitos sostenibles en su vida diaria”.
Según el ejecutivo, “la guía también refuerza prácticas sencillas, como limpiar, secar y aplastar los materiales antes de entregarlos. Una buena identificación y clasificación de los residuos en origen, permite una mayor costo- eficiencia para el retiro de los residuos y la logística de los vehículos, optimizando la cantidad de viajes, los volúmenes transportados, los tiempos de ruta y los costos de gestión, entre otros”.
Superando desconfianzas y promoviendo la participación
El estudio Reciclando-Ando 2024 reveló barreras comunes que dificultan la confianza de las personas en los sistemas de reciclaje, como el temor a que los residuos sean mezclados o descartados, o la percepción de lucro por parte de las empresas gestoras. Frente a esto, Urra aclara que “Giro no tiene fines de lucro y su financiamiento proviene directamente de las empresas que ponen envases y embalajes en el mercado”.
Palma agrega que superar estas desconfianzas será un proceso gradual, ya que la Ley REP tiene un enfoque de implementación progresivo, con metas a largo plazo. “Estamos comenzando una maratón que requiere estrategias comunicativas, educación territorial y un esfuerzo colectivo para lograr un cambio de hábitos y una mayor calidad del material reciclado”, señala.
Residuos reciclables y dudas comunes
Más de la mitad de los plásticos reciclados de los hogares corresponden a PET (Tereftalato de polietileno), identificado con el número 1 y que son principalmente envases de alimentos y bebidas. Aun así, a la hora de separarlos para el reciclaje, surgen dudas como si es necesario sacarles la tapa y la etiqueta, dado que corresponden a otros materiales plásticos. La respuesta, según se afirma en la Guía de Reciclaje, es que no, que actualmente los Gransic recolectan estos envases con tapa y etiqueta. Lo que sí se pide es lavarlos y aplastarlos, para hacer más eficiente su proceso de reciclaje. Importante considerar que las botellas de aceite de PET (no así las de aceite que son de vidrio) quedan excluidas de la recolección.
Otro plástico que es reciclable –aunque su presencia entre los residuos recolectados es menor– es el polietileno de alta densidad, reconocido con el número 2. Según se explica en la Guía de Reciclaje, estos envases pueden ser rígidos o flexibles y nunca son transparentes. Los rígidos se caracterizan por tener una línea recta en su base y su uso es frecuente para lácteos, detergentes y shampoos. En este grupo se excluyen del reciclaje las botellas de cloro, residuos corrosivos o peligrosos. Al igual que el PET, pueden reciclarse con tapas y etiquetas.
De acuerdo con el estudio Reciclando-ando, sólo un 21% afirma que el servicio de reciclaje recibe plásticos flexibles, a pesar de que –como se explica en la guía– estos sí se recolectan. Corresponden principalmente a los números 4 (polietileno de baja densidad) y 5 (polipropileno), donde se encuentran –por ej.– envases de pan, de papel higiénico y servilletas, de arroz, verduras congeladas y embalajes de packs de botellas y latas.
Herramienta clave para una transición sostenible
La Guía de Reciclaje 2024 no solo busca aumentar las tasas de reciclaje, sino también sensibilizar sobre prácticas responsables en la disposición de residuos, fomentando un enfoque sostenible en los hogares. Descarga el documento y accede a más información en Circula el Plástico.